Un “sexionario” es un diccionario con términos que tienen relación al sexo que quizá ya practicas, pero que quizá no sabías con exactitud cómo definirlos.
Mandar mensajes cachondos al celular de alguien más, escaparte de una fiesta para tener sexo o llevar un bolso equipado para una noche de pasión tiene un nombre preciso.
Es necesario que amplíes tu vocabulario y te enteres de qué significa cada término que describen algunas de las prácticas sexuales que haces:
Bangover: Se refiere al dolor muscular que se experimenta después de una sesión material. Es, de algún modo, una resaca sexual.
Cancaneo o dogging: Proviene de “dog” o perro y hace referencia a tener sexo en cualquier lugar, es decir, sexo en lugares públicos -como lo hacen los canes- a fin de exhibirse y aumentar la excitación.
Cosquillas eróticas o tickling: Se refiere a hacerle cosquillas con fines sexuales a tu pareja en “los previos” o momentos preliminares al acto sexual.
Friendsco o precop: Es el consentimiento verbal y explícito para un “amigovio” o “amigos con derecho”. Este acuerdo se establece antes de tener intimidad y dejar en claro los términos de “solo sexo”.
Humasexual: Hace referencia a todo aquel que se siente atraído por los seres humanos en general, sin importar su sexo.
Sexting: Consiste en intercambiar mensajes eróticos por celular. Incluyendo videos e imágenes sexuales.
King out: Se trata de una práctica usual en las primeras relaciones amorosas o de adolescentes. Se trata de besar, tocar y acariciar a tu pareja para aumentar la libido sin llegar al coito.
Sexit: Es la salida rápida y espontánea después de una fiesta o de una noche de copas con tu acompañante.
