Las tarjetas de crédito son un instrumento que muchos de nosotros usamos todos los días y que comúnmente cargamos en nuestras carteras, por ello están en constante riesgo ante diversas amenazas y fraudes. He aquí la importancia de investigar y saber elegir por medio de comparadores online como https://comparaya.mx/ la tarjeta que nos brinde mayor seguridad.
¿Cuales son los riesgos a los que se encuentra expuesta nuestra tarjeta?
Al tratarse de un objeto que, en esencia, contiene dinero, utilidad y datos confidenciales, las tarjetas de crédito son elementos de muy alto valor y que claro, son el mayor blanco de acciones criminales o fraudulentas.
Aunque no es recomendable (según expertos en cultura financiera) cargar en todo momento la tarjeta de crédito, y deberíamos sólo portarla cuando ya estemos decididos a realizar una compra, la realidad es que muchas personas mal acostumbran a nunca sacarla de su billetera.
Esta acción propicia que se encuentre en mayor riesgo cuando estamos en la calle, usamos el transporte público o nos encontremos en cualquier lugar que nos coloque como blanco fácil para delincuentes que extraigan nuestra cartera, ya sea con violencia o sin que nos demos cuenta.
Tampoco hay que pasar por alto de que por simple accidente o descuido podemos extraviar nuestra tarjeta de crédito, dejándola expuesta a que alguna persona ajena pueda hacer uso malintencionado de ella.
Inclusive no es necesario perder físicamente el plástico, al hacer compras o pagos, también se encuentra sujeta a prácticas fraudulentas tales como la clonación o cargos no reconocidos.
Esto suele ocurrir cuando hacemos compras en lugares no regulares, los cuales instalan dispositivos en las terminales que pueden extraer los datos de la tarjeta. De igual manera puede suceder cuando realizamos compras en línea, donde tenemos que ingresar información confidencial de esta.
A pesar de que cada vez estos sitios tienen medidas más estrictas en cuanto a la seguridad y confidencialidad de la información que manejan, siempre está latente el riesgo con este tipo de compras, por lo que hay que saber cómo reaccionar y qué medidas tomar.
¿Qué nos protege ante estas situaciones?
Debido a estos incidentes y la frecuencia con la que ocurren, las instituciones bancarias ofrecen elementos de seguridad en caso de ser víctima de alguno de estos delitos. La tarjeta de crédito Banorte, por ejemplo, cuenta con un blindaje automatico de 48 horas antes de que se realice una operación con carácter fraudulento o robo.
De igual manera todos los bancos cuentan con líneas de atención donde puedes reportar robo, extravío, clonación, fraude, cargos no reconocidos o robo de identidad.
En estas líneas puedes solicitar rápidamente la cancelación y desactivación de la tarjeta en cuestión para que no se realicen compras por parte de los criminales. De igual manera se abre una investigación en la cual, en caso de que ya se haya hecho el cargo, el banco determinará si efectivamente se trató de un fraude y pueda devolverte el dinero.
Además de esto todas las tarjetas tienen elementos básicos de seguridad integrados, como los números se seguridad en la parte posterior, el nip que uno mismo le asigna e inclusive, se necesitan firmas especiales o tu huella digital al momento de hacer una compra como es el caso de la tarjeta de crédito Inbursa.
A pesar de todos estos recursos de seguridad, es de suma importancia siempre ser precavidos con dónde y cuándo hacemos uso de nuestra tarjeta de crédito, tener disponibles los números de para reportar incidentes y nunca exponer a nadie los datos confidenciales.
