Una mujer de 32 años de edad y madre de dos pequeños murió luego de someterse a un levantamiento de glúteos en Nueva Jersey.
Tras acudir a realizarse la cirugía estética conocida como Lipo 360 y un levantamiento de glúteos, Rachelle Demosthenes, junto con su amiga, Jeanine Ellis, pagaron 300 dólares para pasar dos noches en una supuesta casa de recuperación quirúrgica que no contaba con lo necesario para atenderlas.
Las dos amigas acudieron a este lugar después de haberse operado, en donde les prometieron que habría una enfermera durante 24 horas que estaría al tanto de ellas y ante una mala atención, Rachelle fue hallada inconsciente y convulsionando, probablemente por una sobredosis de analgésicos.
Fue declarada muerta en menos de 24 horas después de la cirugía estética a la que se sometió.
