En China, un joven estudiante universitario se volvió viral tras presentar un peculiar invento: un dispositivo que permite dar y recibir besos a distancia.
El aparato cuenta con unos labios de silicón que imitan la textura y la presión de un beso real. A través de una aplicación móvil, las personas pueden sincronizar el dispositivo con el de su pareja y así “enviarse besos” aunque estén separados por miles de kilómetros.
El invento ya generó debate en redes sociales: algunos lo ven como una solución divertida para las relaciones a distancia, mientras que otros lo consideran extraño y hasta un poco inquietante.
El estudiante explicó que su motivación fue la nostalgia, pues durante la pandemia no pudo visitar a su pareja y pensó en una forma creativa de acortar la distancia.